Luciano Casanova

Rosario en el 2050

Rosario, la segunda ciudad del país, fundada en base al contrabando para evitar la aduana de Buenos Aires siempre ha sido base de la lucha entre el interior y Buenos Aires.

Desde el polémico proyecto del tren bala del 2008 que resultó un fiasco al provocar un grave accidente, las tensiones entre Buenos Aires y el interior aumentaron.
Aún así el gobierno mantuvo su popularidad al entablar un conflicto armado contra Chile. Un desperdicio. En un fatídico 2032 se perdieron cientos de vidas por unas áridas tierras del sur de Chile, sin utilidad; pero aún así las aguas se calmaron durante ocho años

Hoy en día me levanto a la mañana, como siempre, desayuno con mis hijos y mi esposa y salgo a trabajar como si nada, a sabiendas que los separatistas pro- interior están por doquier.

Si bien en Rosario ha habido progresos como Internet inalámbrico que uso todos los días de mi vida cotidiana en cualquier lugar de la ciudad, eso no compensa la falta de infraestructura que hace que transitar por el centro de la ciudad sea imposible.

En mi pasado tuve que luchar en la guerra contra Chile; estuve ayudando a los separatistas con apoyo tácticos e incluso ayudé enseñando a las tropas separatistas las tácticas de batalla.
Del ejército tengo buenos recuerdos, pero la batalla fue una de las peores experiencias que tuve y pensé que ayudando a los separatistas se borrarían mis malos recuerdos. Estaba equivocado.

Ahora, con 50 años tengo muchos malos recuerdos; pero mi vida me ha enseñado que lo único que debemos hacer para mejorar y hacer grande este país es ser buenas personas y cumplir con nuestra obligación, no más.

Si la gente del 2008 lo hubiera visto, no hubiésemos pasado 42 años estancados sin avanzar ni retroceder.

Luciano Casanova