martes, 1 de julio de 2008

Maria González

Rosario en el 2050

Carla pensó que todo estaba perdido, que ya no había nada para disfrutar en un mundo donde se estaba acabando y consumiendo todo lo lindo como podía ser un auto ese tiempo tan duro que estaba viviendo la ciudad por falta de combustible, de servicios, de transporte.

Al salir de su casa, ella se encontró con una señora que le comentó que todo estaba por cambiar, que ya no iban a estar más sin servicios porque habían encontrado una solución para el transporte o cosas que consuman combustible, que no iban a volver a necesitar de ellos.

Fue así que Carla cierto día vio una familia transportarse en un auto que en vez de trabajar con un motor y de tener los implementos mecánicos, era manejado manualmente, se accionaba como si fuera un andador
A Carla y a las demás gentes les resultaba raro, pero para esa familia era lo mejor ya que no iban a perder mas tiempo y no dejarían disfrutar los días de verano tan bueno como se habría anunciado para el ciclo del 2050.

Finalmente, Carla comprendió lo lindo que puede ser la vida si disfrutamos a pesar de que no contemos con muchos servicios, que nada nos favorezca, o de tener que esperar para poder realizar los deseos.

María González

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