viernes, 13 de junio de 2008

Damian Miño

Después de la guerra , de la tercera guerra mundial ocasionada por el conflicto con el agua, Rosario había quedado deshabitada. Las ruinas se veían en toda la ciudad y sus alrededores.
Había un grupo de personas resignadas a perder la ciudad que los vio nacer, sin embargo tenían un espíritu emprendedor querían reconstruir todo tal cual estaba . Y con la tecnología que había en ese entonces, la construcción era cuestión de unas horas. Pero al estar todos los puertos destruidos no se podían importar materiales que faltaban acá. Ustedes se preguntarán ¿por qué los ingresaban por aire?. Es que era imposible por causas que les contaré más adelante.
Las personas emprendedoras que querían construir la ciudad eran unas de las pocas que quedaban con vida.
Les cuento un poco como era el clima en ese entonces; llovía por las noches y sofocaba el calor por las mañanas mientras que a la tarde el frío era insoportable. Les cuento todo esta para que vean que la construcción era casi imposible.
Pero estas personas no se rindieron y de las ruinas sacaban materiales para la construcción de los que ellos consideraban más importantes. Como el Monumento a la Bandera. El Monumento a la ciudad; el Monumento a la Nación que había sido construido 20 años atrás con excepción del Monumento a la Bandera que era el Monumento más viejo y el más apreciado por los ciudadanos.
La construcción se había puesto en marcha. Cada vez más personas se mudaban a la ciudad o o que quedaba de la ciudad.. El clima había cambiado para el bien de todos; era más templado y favorable para la construcción.
Todo estaba en marcha, había llegado ayuda de otros lugares y todo esto contribuía a todo un clima de felicidad para los emprendedores y todo, en fin . eran buenas noticias y todo estaba marchando bien. Aunque Argentina había perdido de reserva de agua eso no era un problema para Rosario.
Las construcciones fueron terminadas, la nueva vida se había puesto en marcha, se registraban nuevos monumentos y la felicidad se veía en las calles.
Los emprendedores de este sueño pudieron morir en paz y fueron recordados por siempre y en su honor se hicieron grandes monumentos recordatorios.

DAMIAN MIÑO

No hay comentarios: